Al llegar la última jornada, los únicos países con opciones de título eran Brasil (4 puntos) y Uruguay (3 puntos), que debían enfrentarse directamente. Tal era el ambiente triunfalista que incluso el presidente de la FIFA, Jules Rimet, llevaba un discurso en el bolsillo derecho de su chaqueta, en homenaje a los campeones brasileños, camisetas de futbol replicas escrito en portugués. En la Copa Italia de ese año llegaron hasta a las semifinales, instancia en que la Roma ganó la eliminatoria tras vencer por 2-0 en el estadio Olímpico de Roma y perder por la cuenta mínima en Údine.